Valencia, 14 oct (El Carabobeño, por Beatriz Rojas ) La inseguridad y el desarrollo de otros municipios han traído como consecuencia que el centro de Valencia ya no sea tan atractivo como antes cuando toda actividad convergía allí. La gente sigue visitando el centro porque ahí se encuentra la mayor cantidad de establecimientos comerciales, pero tiende a retirarse mucho más temprano que antes, por efecto de la inseguridad. En la década de los 70 había negocios abiertos hasta las 8 de la noche, sobre todo en temporada decembrina, pero ahora muchos cierran a las 5 y media de la tarde.
Para evitar que los feligreses sean víctima de la delincuencia, en la Catedral de Valencia se oficia la última misa del día a las 5 de la tarde. Incluso los buhoneros comienzan a recoger sus cosas más o menos a esa hora. Mientras más lejos esté de la plaza Bolívar (al frente está la sede principal de la Policía Municipal de Valencia), más temprano cierran los negocios.
Valencia con un solo cine
Uno de los principales atractivos que tuvo Valencia en épocas pasadas, fueron sin duda sus cines. Cientos de personas amantes del llamado séptimo arte, con sólo llegar al centro tenía a su disposición los cines Imperio, Tropical y Centro. Adicionalmente en la avenida Bolívar Norte funcionaban los cines Alfa y Guaparo. Había otra sala de cine en el Centro Comercial Siglo XXI de la urbanización La Viña.
Para quienes tenían carro podían ver sus películas desde él en el Autocinema El Trigal, Cine Carr y Autocine, estos dos últimos en la avenida Cuatricentenario. Ahora la ciudad sólo cuenta con la sala de cine que funciona en el Centro Comercial Patio Trigal, pues hasta los autocines desaparecieron.
La Ley de División Político Territorial aprobada a finales de la década de los 90, trajo como consecuencia que Naguanagua y San Diego ya no formen parte de Valencia. Y es en estos municipios donde ahora funcionan los grandes centros comerciales como La Granja, Sambil y Metrópolis donde ahora están los cines.
En la ciudad lo que otrora fue el cine Tropical, ahora funciona un estacionamiento abierto. Los espacios utilizados para los cines Centro y Guaparo son destinados en la actualidad para reuniones de grupos religiosos. Y la estructura de lo que fue el cine Imperio sigue allí como un elefante blanco que no tiene ningún uso. Su fachada tiene un enorme letrero que indica que fue tomado por el grupo Frapom, pero sólo eso.
Casas en ruinas
Sigue llamando la atención las cantidades de casas en ruina que se consiguen en el centro, sobre todo hacia las zonas menos transitadas, a la mayoría de las cuales tampoco se les da ningún uso. Algunas de ellas representan un riesgo para los transeúntes
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